Dominique Chambriard
La unión de los artesanos para defender sus tradiciones
Thiers, capital de la cuchillería francesa
Encaramadas en las estribaciones del Macizo Central, las viejas calles de Thiers ofrecen un impresionante panorama de las verdes extensiones de Auvernia, salpicadas de montañas y volcanes extinguidos. Establecida sobre un antiguo asentamiento galo, la antigua ciudad de Thiers conserva muchas huellas de su pasado medieval.
Aunque esta región de Francia está poco poblada, Thiers se beneficia de su turismo y de un próspero mercado de la cuchillería, como demuestran las numerosas cuchillerías repartidas por su calle principal.
Algunas casas burguesas de principios del siglo XX son testigos de una época dorada de la cuchillería que hizo prosperar a esta pequeña ciudad.
El valle de las fábricas alberga las antiguas fábricas de cuchillos de Thiers, construidas a orillas del río Durolle. Hoy en día, la industria ha abandonado el valle para instalarse en otros lugares de la ciudad, y estos antiguos edificios vacíos se han convertido en lugares de interés turístico, como la antigua fábrica de Creux de l'Enfer, que se ha transformado en un museo de arte contemporáneo.
Thiers tiene actualmente fama de ser la capital de la cuchillería francesa: el 80% de los cuchillos producidos en Francia se fabrican allí, y la ciudad alberga un centenar de empresas de este sector. Además, estos conocimientos también se utilizan en otras industrias, como la forja de piezas de automóviles o las prótesis quirúrgicas.
La cuchillería, un saber-hacer que sigue vivo
En las afueras de la plaza principal de la ciudad, Dominique Chambriard regenta su cuchillería, donde vende, afila y restaura cuchillos de todo tipo, algunos de ellos muy antiguos. La tienda de Dominique cuenta con un taller con equipamiento moderno, pero también tiene una fragua tradicional en casa, donde realiza sus trabajos más delicados, como el acero de damasco. Como muchos cuchilleros de Thiers, su familia lleva varias generaciones en el negocio.
En Thiers, la tradición cuchillera continúa, en parte gracias al CFAI, una escuela de cuchillería que forma a las nuevas generaciones en el oficio. El sobrino de Dominique es uno de ellos, y trabaja en la tienda familiar con el aprendiz de su tío. Como muchos cuchilleros de Thiers, Dominique Chambriard es miembro de la Fraternidad del cuchillo (Confrérie du couteau) "Le Thiers", que protege una forma de cuchillo típica de la región. Gracias a esta asociación, Dominique no sólo puede vender cuchillos industriales, sino también vivir de la producción de cuchillos artísticos.
La Confrérie des Couteliers de THIERS®, , una transformación para los artesanos
En 1993, los cuchilleros de Thiers formaron una cofradía para proteger su saber-hacer regional, como reacción a lo sucedido con el cuchillo Laguiole, típico de la región pero víctima de numerosas falsificaciones.
En 1994, registraron la marca de cuchillos « LE THIERS® », una forma de cuchillo típica de la región que no puede comercializarse sin el permiso de la hermandad. En palabras de Dominique: "Gestionamos los Thiers como el vino o el queso: lo hacemos todo in situ, y no podemos hacerlo en otro sitio. En efecto, este cuchillo sólo puede ser creado en Thiers, por artesanos miembros de la cofradía.
A pesar de la forma estandarizada del cuchillo, deja espacio a la creatividad de cada cuchillero en sus colores y decoración. Sin embargo, el cuchillo debe llevar sistemáticamente el logotipo "T." de Thiers seguido de la firma del cuchillero.
Desde la fundación de la Cofradía de Cuchilleros de Thiers, los cuchilleros de Thiers han podido perpetuar su saber hacer tradicional al tiempo que lo han mejorado. De hecho, participan en demostraciones en el Museo de la Cuchillería y exponen sus trabajos en el festival internacional Coutellia, con sede en la ciudad. Para este último, cada año se encarga a un joven cuchillero la creación de un nuevo diseño de cuchillo "Thiers" para decorar el cartel del evento.
A pesar de que los cuchilleros de Thiers están arraigados en su región, esto no los hace menos cosmopolitas, ya que el festival es una oportunidad para conocer a otros maestros de este oficio de todo el mundo. Gracias a estas nuevas acciones de los artesanos de Thiers, la cuchillería se ha convertido en el orgullo de esta pequeña ciudad de Auvernia.
Manuel-Antonio Monteagudo
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